No es casualidad que Trump esté imponiendo estas medidas proteccionistas de forma repentina, sino que es parte de una serie de eventos más generales.

La economía global está un paso más cerca de la guerra comercial total si Estados Unidos implementa su amenaza de poner aranceles al resto de importaciones.

El crecimiento de la economía china ha sido exponencial, y ahora se ve a China como una amenaza real que pone en cuestión el liderazgo tecnológico de Estados Unidos.

La globalización no respeta fronteras. Bien lo sabe Donald Trump, aunque en sus proclamas y tuits priorice los nacionalismos.

EUA utiliza la política de aranceles frente a las importaciones que provienen de China y trata de hacerlo mismo con las de México.

Todo empezó cuando el presidente de Estados Unidos proclamó en diciembre 2016, al empezar el mandato, su objetivo de "America Firs" ("América por encima de todo").

Parece que se está ante un proceso de declinio económico americano, a pesar de todos sus inventos.

La agenda internacional se ha visto tensionada por las medidas de la administración de Trump en relación al tema de los aranceles a los productos chinos.

Hay una creciente preocupación por el impacto de las tensiones comerciales actuales.

Las diferencias entre EE.UU. y China son algo más que la imposición de aranceles por parte del presidente Trump al país que económicamente puede finalmente hacer sombra al gigante americano.

La economía global estaría amenazada por la aparición de medidas neo-proteccionistas en los países del Primer Mundo.

El turismo fue el mayor éxito de la economía cubana: el número de visitantes aumentó 16% en 2017 sobre 2016 y 17 veces respecto a 1989.

España y Portugal han sido dos de los países más castigados por la crisis económica en Europa.