Independiente de que un personaje "siniestro" para las finanzas públicas catalanas como Leonard Carcolé Director de ACA, tenga fobias insuperables y vendettas sin ejecutar, la cultura que nuestros políticos han trasladado a la opinión pública ha generado unos tópicos sobre el agua que va a resultar muy difícil de borrar de la conciencia colectiva y que son, de alguna manera, el virus más dañino con el que se han encontrado los verdaderos gestores del agua, a la hora de "aconsejar" las decisiones adecuadas en aquellos momentos en los que había que hacerlo.Por lo que parece,era más fácil barrer las subidas debajo de una alfombra y esperar, que "asumir" decisiones, en muchos casos tremendamente "impopulares".
Hoy, aunque sea tarde, habrá, utilizando un tópico muy acuático, que "mojarse",cueste lo que cueste,para devolver los costes a sus justos términos y eso, va a resultar demasiado doloroso y especialmente duro. ¿Lo tienen que asumir los gestores privados o los que desde el poder han tomado las "decisiones políticas" más extrañas?
Para el autor esta es una pregunta de fácil respuesta, que no esconde para nada, los citados "tópicos" que para quien se atreva a analizarlos desde la sencillez tienen una identificación muy sencilla.
Primer Tópico:La gestión Privada encarece el precio del agua
Eso es manifiestamente incierto. Por los datos perfectamente comprobables, se sabe, por ejemplo, que en Europa, continente de referencia, los países en los que sus ciudadanos pagan más el recibo del agua que consumen son Dinamarca, Holanda y Dinamarca. Tres países en los que el oro blanco está gestionado por empresas públicas, que eso sí, repercuten los costes reales de saneamiento y "transporte" hasta el grifo en el consumidor final. Un detalle, que para algunos dirigentes políticos españoles ha pasado casi desapercibido, salvo honrosas excepciones.
No es la gestión privada la que limita el acceso al agua: 1.000 millones de personas no tienen acceso al agua potable y otros 2.600 millones no disfrutan de ningún tipo de saneamiento. Datos tan aplastantes que traen de cabeza a los organismos internacionales, que han dirigido sus esfuerzos hacia aquellos gobiernos, que faltos de recursos de todo tipo, son incapaces de asumir que sus conciudadanos deben poder acceder a un elemento tan básico como lo es el agua, una línea roja, que en millones de casos marca la distancia entre la vida y la muerte.
Tercer tópico:El agua es un recurso sin coste
Sobre el tópico de que el agua es gratis, hay que preguntarse en primer lugar que es lo que permite la gestión privada del agua y para situar el tema en España hemos de mirar hacia la Directiva Marco del Agua, que comienza por el reconocimiento de que la administración del agua pasa por la gestión de un ecosistema que ha de marcarse el objetivo de "la preservación del medio natural" que abarca tres parámetros: sostenibilidad, escasez del recurso y calidad del mismo.
La preservación del medio natural implica el uso responsable del recurso, el saneamiento, reutilización del agua, etc. En España y en lo que se refiere al saneamiento nos movemos en torno a dos referentes legales: El Plan de saneamiento 1995-2005 y el Plan nacional de Calidad de aguas 2007-2015.Referentes que implican una difícil aplicación, y por supuesto, unos costes nada desdeñables, por lo que, llegados a este punto, la pregunta que hemos de hacernos es muy simple: ¿Cuánto nos gastamos en este país en sanear nuestras aguas?
El cuadro que así lo detalla es muy ilustrativo

Por eso las conclusiones son muy sencillas
? Hay que concienciar al ciudadano que el agua no es un recurso sin costes.
? Es importante la definición de marcos regulatorios claros y estables que permitan la financiación del servicio y sus infraestructuras.
? El precio del agua no está vinculado al sistema de gestión, pública o privada, sino a la recuperación de los costes reales.
? Aislemos de los "ciclos electorales" la financiación de los servicios y las infraestructuras.
? Unifiquemos la gestión y las fases del ciclo integral del agua.
? Aquí y ahora, hemos de recorrer un camino que sitúe el precio del agua y su saneamiento en unos niveles similares a la media europea.
? Digamos, alto y claro, que la participación del sector privado, tan demonizado por algunos, permite: Acceso al conocimiento y a la innovación, eficiencia y algo tan "prosaico" pero indispensable como es la financiación de las infraestructuras.
Así que, fuera tópicos, y sobre todo, que lo público y lo privado caminen de la mano desempeñando, en cada caso, con eficiencia y claridad el papel que a cada uno le corresponde porque estamos hablando, no nos engañemos de un sector estratégico indispensable para cualquier país desarrollado.