Expertos consideran que las organizaciones deberán aprender a vivir con niveles aceptables de riesgo digital.
Tras la tormenta americana de los ataques digitales, poco tiene de extraño que los negocios relacionados con la ciberseguridad crezcan como la espuma.
Los ciberdelincuentes saben que las pymes son presa fácil pues no cuentan con una seguridad adecuada.