Andalucía, algo más pequeña en territorio que la vecina Portugal, aporta números muy notables en el mantenimiento de su sistema educativo. He aquí algunos datos relevantes: 7.451 millones de euros como presupuesto en Educación para 2013, bajo el compromiso de "la igualdad de oportunidades y el crecimiento económico a largo plazo".
Un total de 6.196 centros abiertos, de los cuales 1740 son privados. Están escolarizados un total de 1.804.000 alumnos en toda la comunidad, 319.000 en la concertada y 69.000 en la privada. Ejercen en primera linea, en las aulas como profesionales de la enseñanza, un total de 120.000 maestros, distribuidos con la siguiente proporción: 98.000 en la pública, 18.648 en la concertada y 3.282 en la privada. A esta cantidad de personal hay que sumarle entorno a los 10.000 más, entre no docentes o los especialistas dedicados a la educación especial.
Como se puede apreciar el capítulo de la Educación en Andalucía se sustenta en un impresionante conglomerado de medios humanos que, necesariamente, necesita de un presupuesto importante, al igual que sucede con el Servicio Andaluz de Salud, la otra gran partida del presupuesto autonómico, recortado por Madrid en cerca de los 18.000 millones en base al plan de ajuste.
Pero ese dinero lleva tiempo que no fluye con la periodicidad que debiera y, a día de hoy, la falta de pagos es posiblemente una de las brechas abiertas en el sistema andaluz de la enseñanza. Así al menos lo denuncia la única oposición que tiene el ejecutivo andaluz en el Parlamento, o sea el PP.
"La deuda contraída por la Junta de Andalucía con miles de pymes andaluzas pone en peligro la prestación de servicios como los comedores escolares, aulas matinales, actividades extraescolares o el acompañamiento de monitores"
