Juan Moscoso del Prado. Diputado socialista y Secretario de la Unión Europea en la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE
En los estudios de mercado la palabra marca atiende a los elementos o a los signos que sirven para distinguir unos bienes o unos servicios; de ahí viene el origen de esta expresión, marca España, que se maneja desde hace ya una década en el ámbito político y en el de la diplomacia pública española.
La marca España o la imagen de nuestro país tiene elementos positivos para sectores como el turismo o la cultura, para actividades económicas y para valores que remiten a libertades civiles, a democracia, a la transición? Pero también es cierto que contiene connotaciones negativas en otros aspectos, como puede ser en tecnología, I+D y Ciencia, sobre todo tras los recortes que está acometiendo el gobierno del Partido Popular. En este sentido, estoy convencido de que hace daño a la marca España someter a nuestro Sistema Nacional de Ciencia e Innovación al recorte brutal que está sufriendo, precisamente cuando la mayor parte de los centros nacionales de referencia en investigación e innovación, incluso los que han sido referencia internacional, están al borde del cierre.
Hace apenas tres meses saltaba la noticia de que se iban a condicionar las subvenciones al Sistema Nacional de Trasplantes al cumplimiento por parte de las Comunidades Autónomas del objetivo de déficit. Afortunadamente, esta propuesta parece que ha quedado aparcada. Esperemos que para siempre.
Por tanto, no podemos perder de vista ambas realidades, especialmente en momentos de crisis como éste, y debemos saber jugar con la verdad de lo que somos y las interpretaciones que existen ahí fuera, en ocasiones, exageradas, pero otras, acertadas y en sintonía con lo que sucede en nuestro país día tras día.