jueves, 28 de marzo de 2024
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Redacción

Desigualdad y cooperativas de trabajo

Marta Soler y Iñaki Santa Cruz

Marta Soler. Doctora por Harvard y profesora de Sociología en la Universidad de Barcelona
Iñaki Santa Cruz. Profesor de Economía de la Empresa de la Universidad Autónoma de Barcelona

En el artículo se plantea el efecto que tienen las cooperativas de trabajo sobre la disminución de las desigualdades y la aportación de las mismas al logro de sociedades más igualitarias y menos vulnerables.

Una experiencia concreta, la de las cooperativas de Mondragón plantea que las prácticas desarrolladas por esta experiencia contribuyen a la reducción de las desigualdades en las zonas donde se implantan.

La primera cooperativa del grupo, ULGOR, se crea en el año 1956, bajo el impulso del sacerdote José María de Arizmendiarrieta promotor y alma mater del desarrollo de esta experiencia. Al final del año 2013, la Corporación Mondragón, según su Informe Anual, estaba compuesta por 257 entidades: 103 cooperativas, 122 filiales productivas (empresas que no son cooperativas, pero son propiedad de estas), 8 fundaciones, 1 mutua, 10 entidades de cobertura y 13 servicios internacionales.

Estas 257 entidades desarrollan su actividad en cuatro sectores: finanzas (banca cooperativa, seguros), industria, conocimiento (universidad, centros tecnológicos, otros centros educativos) y distribución.

Algunas cifras pueden dar una idea de la dimensión de Mondragón; en el año 2013, los activos totales ascendían a 34.011 millones de euros, los puestos de trabajo medios, a 74.060 personas y los ingresos, a 12.574 millones.

El área industrial está fuertemente internacionalizada con un 36% de los 30.901 trabajadores, desarrollando su actividad fuera de España y las ventas internacionales representan un 71% de las ventas de esta área.

Es importante destacar dos aspectos del grupo de cooperativas de Mondragón. El primero es que estas constituyen una unión voluntaria basada en compartir unos mismos principios cooperativos, un modelo de gestión y unos instrumentos de solidaridad intercooperativa. No existe un vínculo basado en la propiedad. El Congreso Cooperativo constituido por representantes elegidos en cada una de las cooperativas, es el que fija las líneas maestras del grupo y el que elige a los órganos directivos del mismo.

El segundo aspecto es que la gran mayoría de las cooperativas están concentradas en el País Vasco.

Mondragón ha desarrollado una serie de acciones que tienen como consecuencia la disminución de las desigualdades. Vamos a desarrollar algunas de ellas.

Solidaridad retributiva

En el primer Congreso Cooperativo realizado en 1987 se aprobaron los diez Principios Cooperativos que son la filosofía y la guía de la experiencia de Mondragón. Estos principios son una ampliación y adaptación a Mondragón de los principios de la ICA (International Co-operative Alliance) que es la referencia internacional para considerar si una empresa es una cooperativa.

La solidaridad retributiva no se encuentra explícitamente definida entre los principios de la ICA. En el caso de Mondragón este principio es el sexto y establece que las retribuciones deben de ser suficientes y solidarias.

El término suficiente es un factor externo difícil de concretar y en el caso de Mondragón se relaciona con las remuneraciones para posiciones similares en el mercado y se modula en función de la marcha de cada cooperativa, según los resultados de la misma. En función de la situación de la cooperativa esta remuneración puede estar por encima o por debajo de la del mercado. La solidaridad retributiva hace referencia al ámbito interno de la cooperativa y el grupo. Se ha basado en una escala de índices, que en un principio se situaba entre 1 y 3 y se amplió en 1988, a una escala de 1 a 6. Posteriormente en algunas cooperativas la remuneración de los altos directivos se sacó de la escala de índices para tomar como referencia el mercado.

En líneas generales se considera que la remuneración de los socios trabajadores está en línea con el mercado y la de los directivos por debajo del mercado, aunque esto depende de la situación de la cooperativa, dado que en situaciones de crisis, las cooperativas tienen una alta flexibilidad a la baja de las remuneraciones, en base a decisiones tomados por el conjunto de socios en asamblea.

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